Si bien es cierto que la mayoría ha bebido una taza de café, muy pocos han tenido la oportunidad de deleitarse con uno exquisito. Uno para recordar todas las mañanas y acudir para aliviar dolores del alma. La buena noticia es que podemos preparar un inigualable néctar negro. Acá te mostramos todo detrás de cómo preparar un café en casa.
- Compra el café en una tienda especializada
Lo primero que deberás tener en cuenta es el lugar donde estás adquiriendo el café. Opta por tiendas especializadas donde encontrarás expertos que tienen conocimiento de su origen, de cómo se ha cultivado y te aconsejan según los gustos de tu paladar. Además, habrá café fresco; un imprescindible a la hora de la preparación.
En Cacao and Coffee contamos con profesionales que te podrán guiar en tu compra, la preparación de tu café y el maridaje ideal para acompañar tus bebidas. Nuestro principal objetivo es diseñar y ofrecer experiencias para que vivas un momento único con productos 100% colombianos.

2. Revisa el empaque y la tostión
Ten en cuenta que un café de calidad debe estar bien conservado. Nunca optes por uno que esté expuesto al aire o a la luz porque estos agentes externos también afectan su calidad, incluso si aún se encuentra en grano. Así mismo, verifica la fecha de tueste. Te recomendamos consumirlo entre 15 días y 3 meses después de tostado. El café es un producto natural y por lo tanto tiene un tiempo de almacenamiento.
Ahora que hablamos de tueste, es importante que sepas que la tostión determina el sabor que habrá en tu taza de café. Entre más tostado, el café será más fuerte y amargo. Por el contrario, entre menos tostado, más suave y delicado. Para cumplir a cabalidad todas las exigencias de tus papilas gustativas, también presta atención al grado de la molienda. Cuanto más fino sea el tamaño de la molienda más extracción tendrá, es decir tendrás un café más intenso; y entre más gruesa sea, menos extracción y un café un poco más suave. Esto es fundamental a la hora de preparar un café casero porque una sub extracción genera sabores agrios, mientras que una sobre extracción crea un sabor amargo.
3. Opta por agua mineral
Aunque no lo creas, el agua es un elemento crucial para hacer café en casa. Usa agua mineral para que no interfiera con el sabor del café. Además, siempre deberás calentar el agua de forma gradual para no afectar el proceso natural de infusión. En otras palabras, cuando el agua empiece con un leve burbujeo es el momento para apartarla del calor, justo antes de que entre en ebullición.
No te desanimes con toda esta información. Haz una pausa, bebe un poco de café de tu taza, deja que tu alma sonría y… Sigamos.
4. Muele el café según tu cafetera o método de preparación

El tipo de cafetera que tengas en casa juega un papel esencial. Por ejemplo, si tienes una de prensa francesa requiere un café de molienda gruesa. Las cafeteras de filtro tradicionales una molienda tipo media; y las italianas una molienda fina. Sin embargo, ten en cuenta que en las tiendas especializadas pueden moler los granos de café según el método o tipo de cafetera que tengas en casa. Además, es ideal que algún experto te guíe, ya que se recomienda conservar el café de origen especial en grano y molerlo justo antes de la preparación.
Unos de los trucos de los grandes baristas es enjuagar los filtros con agua caliente antes de usarlos para quitarles el sabor de papel; así como precalentar la cafetera y la taza para evitar choques térmicos que puedan variar el sabor del café. ¡Excelentes consejos para preparar un buen café en cafetera!
5. Sé cuidadoso con los ingredientes que agregues a posteriori
Luego de que tu café esté listo en la taza y tu boca empiece a hacerse agua, debes ser consciente que cualquier ingrediente que le agregues posterior a su preparación, va a modificar su sabor. Evita los endulzantes artificiales porque dejan un sabor metálico que puede afectar el sabor de tu café; y no calientes la leche demasiado porque podría amargarlo si sus azúcares se han quemado. Antonio Romero, campeón nacional de Arte Latte y campeón nacional de café y licores nos dice que “la mayoría de los excelsos colombianos son tan fragantes, ácidos, dulces y delicados que no necesitan ningún tipo de endulzante”.

6. Consume el café de inmediato

Recuerda que el café se debe consumir de manera inmediata para que así se disfruten todos los matices de su sabor. Nunca hagas una cafetera para todo el día y vayas recalentando a medida que te lo tomas. Guardar el café lo oxida y recalentarlo lo vuelve rancio. “La amistad es como el café, una vez frío nunca vuelve a su sabor original, aún si es recalentado”, decía Kant.
7. Escoge la taza adecuada
Si quieres llevar la preparación de tu café en casa a otro nivel, la taza en la que lo sirvas te puede delatar como un amateur. Es recomendable que uses una de porcelana porque es un material noble, resistente y conserva muy bien el calor. En cambio, el vidrio o el cristal hace que el café pierda su temperatura rápidamente.
8. Conserva el café
En caso de que te haya sobrado café molido o en grano, consérvalo en un lugar fresco, seco y opaco. Elige frascos de un buen material, con la tapa hermética y sin aromas extraños. No guardes tu café en la nevera, pues al ser un alimento higrosópico (absorbe y pierde humedad), tiene la facilidad de absorber los olores. La buena noticia es que generalmente, el empaque del café especial conserva todas sus propiedades y sabor.
Ahora que conoces todo detrás de cómo hacer café en casa, puedes usar estos consejos como punto de partida para preparar la receta que más te guste. Conoce otros tips y preparaciones en nuestro Instagram o Facebook.
Recent Comments